sábado, 14 de septiembre de 2013

Capitulo 24- El día final


 Capitulo 24- El día final


Hoy, mi ultimo dia.
 Todo me resultaba confuso, no habia nada claro. Las cosas no las veia del todo bien y tardaba en reaccionar, en darme cuenta de que alguien me hablaba.
Amber, me miraba llena de preocupacion y ella iba a ser la unica que supiera lo que yo se.
En cuanto a Daniel, era tan inocente, no sabia nada y aun asi sabia que hacia un esfuerzo por hacerme sonreir, aunque sabe que estoy mas alli que aqui.
Estoy en mi cama junto a Daniel, tengo la cabeza apoyada en su pecho. Entonces le miro, quiero recordarle así con el cabello desordenado, dorado, brillante; sus hermosos ojos zafiro de los que me enamoro cada vez que los veo y por ultimo su sonrisa sincera, sus manos en mis omóplatos y sus labios cubriendo los mios. La sensación de tocar el cielo y no sentir la tierra bajo mis pies.
- Te hecharé de menos, mi amor- susurro y el me miro algo sorprendido, pero no tubo tiempo a reaccionar cuando empezó a gritar.
Grito, por las garras que se introducen en mi piel como cuchillos  que me desgarraban.
Empiezo a revolver, el me intenta calmar, pero yo huyo de alli, como si pudiera dejar atras el dolor que me persigue. Noto que Daniel me sigue.
Intento cambiar de direccion, por que si entro en el bosque no volvere a salir.
Cuando desvió de dirección, la cabeza me explota y noto unas manos apretadas en mi cuello.
- Hazme caso, o te rebano el cuello a todos los que quieres, empezando por el rubito- dijo la voz de Lucinda que me empuja hacia el bosque.
-¡Suéltala!- grito Daniel.
Lucinda me agarro y apretó el cuchillo contra mi cuello.
-Quieto- dijo ella.
El me miro presa del pánico y yo cerré los ojos mientra una lagrima caía por mi mejilla.
Entonces sentí que me mezclaba con el aire y luego volvía a tocar el suelo.
Cuando abrí los ojos estaban en el bosque, en el lugar de  mis pesadillas. Lucinda me apretó contra un árbol, haciendo que me costara respirar.
-Bueno princesita, unas ultimas palabras?- dijo ella con una sonrisa maliciosa.
- Que te pudras en el infierno- dije mientras me revolvía.
Hizo un silbido y a su lado apareció un Jarvian, me miro con sus grandes agujeros negros y esbozo una macabra sonrisa.
- Bueno parece que soy un gran afortunado, voy a matar a la princesa, a esta gran belleza- dijo pasando con suavidad el cuchillo sin llegar a cortarme por mi mejilla.
Grite con todas mis fuerzas, pero nada parecía que nadie me oía.
- Que chillona, no sirve de nada que grites, va a pasar igualmente.
-Daniel, ayúdame, por favor, no me dejes, por favor... 
Y entonces clavo el cuchillo en mi vientre.
Grite y mire hacia abajo la sangre fluía con rapidez mi camiseta estaba empapada y me sentía tremédamente mareada.

Daniel

Ese grito, dios era el de mis pesadillas, pero esta vez era real. La rabia se movió por mi cuerpo deseando ser escapada, y así fue, en forma de grito.
Entonces escuche una fuerte risa y como el suelo templaba bajo mis pies.
y supe de donde vino el temblor, empecé a correr con todas mis fuerzas, trompecé varias veces, debido al movimiento y entonces la vi.
Su cuerpo se había deslomado como el de una muñeca, sus ojos estaban entrecerrados y expresaban dolor, sus dedos se agarraban a la tierra como si todo le diera vueltas.
Lucinda acababa de huir.
Caí de rodillas al lado de Rose.
Mis mejillas estaban llenas de lagrimas.
-Rose-sonó ronco y entre cortado.
Ella abrió sus grandes ojos y me miró.
-No te vayas- dije acariciando su mejilla.
Ella apretó con suavidad mi mano.
-Te amo, siempre- dijo suavemente.
Apoyo su cabeza en mi regazo.
-No te vayas, por favor, te quiero.
Una gota de agua cayó en su rostro y fui consciente de que llovía. La vi respirar con dificultad y de repente se quedo quieta. Me quede paralizado y empecé a llorar contra su hombro, más tarde a gritar y por ultimo a temblar. Y en ese momento se encendió la chispa, y empeze a brillar de una manera extraña.
-¡Daniel!- grito mi padre me gire asustado.
Y de mis manos salio una llama que voló hasta mi padre, el la esquivo de milagro, yo estaba en sock, de mi otra mano salio otra ráfaga que impacto contra un árbol.
Para cuando por fin volví a ser consciente de lo que pasaba todo a mi alrededor estaba en llamas, mi padre había cojído el cuerpo inerte de Rose.
Me había combertído en un monstruo.


Se que he estado la pera de tiempo desaparecida, pero como veis ya he vuelto, y nada espero que me sigaís leyendo y tal; y sobre todo que no me mateís por lo que a pasado en este capitulo xD nada chicas que os quiero, pronto nuevo capituloooo :3

2 comentarios:

  1. No puedes matar a rose y esperar que te perdone asi como asi.
    Espero que arregles pronto todo esto!!!!!!
    Te quiero wappa!!!!
    ;3

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  2. Joder, chuche, vas a hacer que llore, ¿eh? ;)

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